La manera de funcionar de la mente humana es asombrosa, extraña y cargada de misterios. De hecho, ninguna lo hace de la misma manera. Y en ocasiones, el cerebro nos lleva por caminos extraños a nivel cognitivo y de asociación, porque no todos percibimos las cosas que nos rodean o los estímulos a los que nos exponemos igual.
Y eso nos lleva al tema del que queremos hablar en esta nueva publicación: la sinestesia musical. Se trata de un fenómeno bastante poco común que está relacionado con la estimulación sonora y experiencias alteradas o aumentadas. Una situación que lleva a escuchar colores o percibir formas mientras se escucha o se toca música. Y como somos conscientes de que muchos no saben de qué se trata exactamente, hoy vamos a profundizar sobre ella.
¿Qué es la sinestesia exactamente?
En definición, basta con recurrir al Diccionario de la Lengua Española de la Real Academia Española para comprobar que sinestesia significa lo siguiente: “sensación secundaria o asociada que se produce en una parte del cuerpo a consecuencia de un estímulo aplicado en otra parte de él”. Una definición, eso sí, que no es demasiado exacta en lo relativo al concepto de sinestesia musical.
Para hacerlo todo más sencillo de comprender, resulta más recomendable recurrir a la descripción del fenómeno que hace Angela Nelson de WebMD, que describe la sinestesia de la siguiente manera: “La sinestesia es cuando escuchas música, pero ves formas. O escuchas una palabra o nombre e inmediatamente ves un color”. Por raro que pueda parecer, la sinestesia puede provocar que escuches una canción y veas el color naranja.
Colores y vibraciones
Resulta difícil definir la sinestesia de manera concreta, ya que cada persona puede experimentarla de una manera diferente, ya que se trata de una experiencia que sucede en la mente. Para que esto ocurra, la persona debe tener una mente estética cromada, lo que hará que se perciba cada sonido con una sensación colorida a través de un proceso espontáneo.
Y, aunque no todos perciben los sonidos con el mismo color ni de la misma forma, diversos estudios han determinado que generalmente se asocian los sonidos agudos con colores brillantes y claros. Mientras que con los sonidos graves sucede lo contrario y se asocian a tonalidades más oscuras. La sinestesia es algo que suele ocurrir por primera vez en la infancia, cuando la mente de la persona es todavía moldeable y flexible. Y, una vez se experimenta, esto es algo que no cambia a lo largo de la vida.
Compositores con talentos sinestésicos
Aunque se trata de un fenómeno bastante poco común, hay muchos compositores a lo largo de la historia que han tenido talentos sinestéticos. Por ejemplo, Franz Liszt fue uno de los compositores que experimentaban este fenómeno, hasta el punto de que pidió a los artistas de su orquesta que tocaran con diferentes colores,.
Otros casos son los de Leonard Bernstein y Amy Beache. El primero era capaz de percibir cuando una orquesta o solista cambiaba el timbre debido a la cromostesia. Mientras que la segunda asociaba cada tonalidad con un color en particular. Esto provocaba que, aunque nadie notara el cambio, ellos sí que lo percibían, por pequeño que fuera.
